Un grupo de trabajadores ferroviarios de la empresa Trenes Argentinos, que desarrollan sus tareas en la estación de la ciudad de General Güemes, invirtieron tiempo y dinero en el arreglo de una silla de rueda motorizada, perteneciente a un joven con discapacidad motriz en sus miembros inferiores.
Néstor Corregidor nació con problemas en su columna que le impidieron desarrollar su capacidad para caminar, por lo que desde niño tuvo que trasladarse gateando y cuando pudo lo hizo en una silla de ruedas. A diario hacia rodar las ruedas con la fuerza de sus brazos para moverse por las pedregosas calles desde su domicilio en barrio Naranjito hasta el centro de la ciudad, además del gran esfuerzo físico, las sillas de no soportaban mucho tiempo el trajín por lo que en forma constante requería de una reparación.
Los alumnos de la EET 3.102 Nikola Tesla, desarrollaron un triciclo motorizado desde la base de una silla de ruedas común, adosándole una tercera rueda y motores eléctricos, la misma fue presentada en la Feria de Ciencia en el año 2013 ganando la instancia provincial. Este prototipo fue entregado a Néstor Corregidor para que pudiera desplazarse sin esfuerzos en su recorrido diario. La silla duró el tiempo que tuvieron de vida las baterías, un año y medio aproximadamente, luego por un error que cometieron quienes quisieron arreglarla al colocarle una batería de auto, quemaron una plaqueta muy difícil de conseguir. Corregidor estuvo un año sin su silla de rueda hasta que un grupo de ferroviarios decidieron juntar el dinero y sus pocos conocimientos en electrónica para volver a ponerla en funcionamiento. “compramos las tres baterías de 12 Volt que utiliza, esperamos un tiempo por el envío de la plaqueta desde Bs. As. pero todo se complicó porque el motor también estaba dañado y tuvimos que cambiarlo, demoramos mucho más de lo esperábamos pero hoy le estamos entregando el triciclo motorizado a Néstor, queremos agradecer a nuestro jefes que permitieron que lleváramos el triciclo a los talleres del ferrocarril y a la Unión Ferroviaria que también hizo su colaboración al igual que a todos nuestros compañeros ” expresó Gustavo Moyano. En total la inversión fue de $ 9.000 y quedaron a disposición para su mantenimiento, “solo le pedimos que por cada problema que tenga a futuro vaya a vernos, aprendimos mucho investigando por internet, consiguiendo asesoramientos de especialistas que estamos en condiciones de realizar los mantenimientos correspondientes”. Por su parte Néstor se sintió muy agradecido por el gesto solidario, “la voy a cuidar como a una mujer, porque sin ella hay muchas cosas que no puedo hacer, estoy muy emocionado y agradecido con estas personas que aunque a muchos de ellos no los conozco pero sé lo buenas personas que son”. Néstor subsiste de una pensión por discapacidad y vive junto a una hermana y su familia en barrio Naranjito
Fuente: El Tribuno